domingo, 3 de mayo de 2009

Un camino...


Hay veces que nos damos cuenta de cómo se nos cierne lo evidente, la verdad que escondíamos tan celosamente, cuando comenzamos un nuevo camino. Yo lo recorro ahora, un camino denso... Su hierba me impide el paso. Veo señales que me piden queme detenga, a tirar la toalla. Me niego a renunciar a estas alturas, llámame soñadora, luchadora, rebelde o invencible...llámame mujer.


Quiero ir por la vida sin necesidad de seguir huellas, intentar lo que otros intentaron, aunque hubo quien falló... no les culpo, serían débiles como yo... y si no lo logro, al menos lo habré intentado, una heroína anónima caída en la batalla...pero...¿Dónde está escrito que tropezaré? Hoy no lo sé, y quizás tampoco mañana, ya son dos días más en los que me lanzo ciega al camino.


Lo más difícil de caminar, en mi opinión, es hacerlo sola...Buscaré, aún en el lodo cenagoso, un brillo en cualquier mirada. Mi alma así se consuela.


Espera, empiezo a notar un tímido brillo en la espesura, entre las ramas de la más alta maleza...Estoy cansada, agotada, pero mi alma aún grita su deseo de continuar, y si así lo desea...yo sigo.


No dejes de brillar, tu...quien me anima, quien está a mi lado caminando...porque si lo haces, en este bosque mi alma morirá, rendida.

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